A 4,000 metros sobre el nivel del mar y con dos millones de hectareas de extensión, la Reserva del Manu es el mayor de los Parques Nacionales del Perú y una de las 56 Areas Naturales Protegidas.
Y es uno de los pocos lugares del mundo -por no decir el único- en el que el proceso evolutivo de las especies no ha sido interrumpido ni condicionado por el aluviónico desarrollo tecnológico; razón que justifica la declaración de Patrimonio Natural de la Humanidad concedida por la UNESCO en 1987.
La Reserva del Manu comprende territorios de los departamentos de Madre de Dios y Cusco y dada su ubicación geográfica en la base de los Andes, y lo abrupto de su fisiografía, el Manu presenta una amplia gama de climas y paisajes. Desde las frías punas, a más de cuatro mil metros de altitud, hasta las tórridas llanuras inundables amazónicas con apernas 200 metros de altitud.
Esta variedad climática origina una gran diversidad natural en la flora como de fauna, habiéndose registrado más de 800 tipos de aves, 200 mamíferos, un centenar de variedades de peces y cerca de un millón de especies de insectos y otros invertebrados. En cuanto a la vida animal silvestre, se tienen registradas 160 especies de las 480 existentes en nuestro territorio.
Entre las principales actividades de ecoturismo destacan los paseos en carretas tiradas por llamas (auquenidos), llamados “Llama Taxis” que están operados por la comunidad campesina de Jajahuana y ofrecen dos circuitos. El primero recorre 15 kilómetros entre Acjanacu y el mirador Amazónico de Tres Cruces; el segundo ofrece un recorrido variable (según el gusto del visitante) entre Acjanacu y el bosque nublado del Manu.
Comentarios
Publicar un comentario